En este volumen el autor realiza una génesis del principio y derecho de la libertad religiosa en el corpus legal peruano, desde el siglo dieciséis hasta el presente. Destinado a considerar la pertinencia de una "ley de asuntos religiosos", en el capítulo central del libro se afirma: "el Estado haría mucho a favor de la consolidación de la identidad nacional si tuviera en cuenta las necesidades de protección legal de los pueblos aborígenes que detentan una religiosidad originaria milenaria". El objetivo principal del estudio, desde esta perspectiva, es fundar las bases de lo que sería un Derecho de la Religión peruano que evite ser meramente declarativo y/o burocrático, y sobre todo que tenga un cariz democrático, inclusivo, con miras a una necesaria modernización institucional del Estado y la sociedad.