Editorial(es): Juan Gutemberg
Lugar de publicación: Lima
Año de edición: 2003
Número de páginas: 491
Manuel es hijo de un indio comunero en la heredera de un latifundio serrano. Esta filiación exagerada lo sitúa -casi al filo de la navaja-, en medio de dos mundos contrapuestos: el de los terratenientes y la clase alta del Cusco, y el de los indios, los desheredados de la tierra. Su abuelo materno -científico autodidacta y excéntrico-, es también el mayor "gamonal" de la región. Ha logrado convertir, con la ayuda de una india vieja, un tonto de nacimiento y unos indios medio mágicos, un cenagal infecto del Valle Sagrado, en huerta prodigiosa. La abuela materna, considerada santa en su juventud debido, es , en realidad, un personaje desmesurado, capaz de los mayores prodigios y las mayores iniquidades. Por ella se entera de que el pueblo, aparentemente tranquilo donde nada sucede, es campo minado de pasiones violentas, amores extravagantes y odios incontrolados. El abuelo paterno es jefe de la comunidad, respetado cabecilla de la región, y suerte de augur que conduce a los suyos con sencillez y sabiduría. No obstante, la época es tensa y las circunstancias lo llevan a conducir la rebelión indígena contra los antiguos patrones. Manuel completa sus estudios básicos en un colegio exclusivo del Cusco, donde va entendiendo de qué manera está organizado el mundo y en qué lugar del tablero debe situarse. Ayudan en este proceso la frustración de sus amores juveniles, su profunda identificación con los indios, y la irrupción avasalladora del sexo.