En La nación subyacente, Natalia Sobrevilla reúne doce ensayos en los que analiza la significación de la Independencia peruana, así como algunos de su eventos y protagonistas más representativos. Mediante una singular perspectiva historicista, la autora ofrece un enfoque que problematiza las categorías al uso de nación e identidad y propone pensar el complejo proceso emancipador desde una mirada más amplia, contrastante y ajena a las dicotomías nacionalistas. Se trata así de una obra que desarrolla una comprensión más profunda de la forma como el Perú pasó de ser una nación incipiente a una república independiente.