Hay muchas cosas que saludar en este libro disidente dentro del periodismo peruano contemporáneo: su contraposición a la «moral» izquierdista predominante, su oportuna reacción crítica al poder de turno, su sinceridad, su apuesta por cierto cartesianismo desconocido en la esfera intelectual local y su aliento poético que naufraga salvándose de la puerilidad y miseria de la política real. Por ello, es inusitado y motivador que un periodista –que es al mismo tiempo un contemporáneo inoculado de «pasión» literaria– convoque a la razón, aunque fuera en un aquelarre de brujos ilustrados en medio de la canícula. (Julio Heredia).

Es un «ojo zahorí» el de Juan Carlos Lucano, quien nos muestra el respectivo rigor de los acontecimientos que, desde ya, quedan como un «Testamento de la razón», una manera particular de abordar la realidad con un inmenso contenido de objetividad con expresión propia. Lucano es un escritor que le otorga al periodismo un gran sentido literario. (Armando Arteaga).