El libro propone la Antropología y Arqueología del imaginario mediante el estudio de los escudos y blasones. En la primera parte, aborda en el convulso periodo colonial en la antigua capital incaica, la producción del primer escudo hispano que habría originado otro escudo mestizo cusqueño que muestra iconografía incásica y un proto nacionalismo emergente en la sociedad local, que posteriormente, con la república, aboliendo los derechos genealógicos incásicos, esta ideología incásica se re-artículo en el discurso regionalista o en la ideología cusqueñista que creo una nueva emblemática local. Relacionado al desarrollo de esta ideología local, en 1986 se institucionalizo como escudo de la ciudad la pieza arqueológica conocida con el nombre de disco Echenique. En el libro se presenta un estudio de esta pieza, su cronología y simbología sobre en el entramado iconográfico, que muestra que se acerca a la representación cosmográfica estelar y astronómica y que pudo tener función calendárica. En el Cusco, los incas manejaron estas iconografías también con esta misma función y el autor lo demuestra con la iconografía simbólica de las huacas incas de los alrededores de la ciudad. En una segunda parte del libro, el autor aborda en el marco del desarrollo de la significación en el urbanismo con la colocación de estatuas y placas, sin embargo, en el nuevo marco patrimonial que regula las intervenciones en las áreas patrimoniales y estas formas expresivas ahora limitadas, se analiza la discusión colectiva que se presentó en torno a la colocación de una estatua en la plaza central cusqueña, que supuestamente representa un inca.