La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano aprobada por la Asamblea Nacional Constituyente francesa en 1789, y la Declaración Universal de Derechos Humanos proclamada por la Asamblea de la ONU en 1948, son reconocidos por la mayor parte de la humanidad y constituyen una conquista de los pueblos en su lucha por alcanzar una vida digna y crear un mundo mejor.

A partir de un análisis comparativo de ambos documentos históricos y con un espíritu crítico, Abelardo Villegas ha hurgado en la historia latinoamericana sobre la evolución de estos postulados en torno a los Derechos Humanos, a la par de la difícil tarea de construcción nacional y de lucha en contra del nuevo colonialismo, sobre todo a partir del ascenso del imperialismo norteamericano.