Este es un libro para el pensamiento humano de la poesía. Si se lee, encontraremos a un poeta lírico que edifica el rascacielos de las emociones intensas. Viaje a Ítaca de Juan Andrés Gómez, descubre a un lírico en plena madurez. Se intensifica para descubrirnos la raíz del día con la noche, la vida que no sucumbe ante la muerte, el encuentro con la utopía regresiva, el ansia de ser el mar cuando es un pájaro que nos visita. Y, así en tantas dimensiones, Juan Andrés Gómez, se hace a un poeta visionario. Se devuelve sentencioso y lírico, busca en sus autores ese hálito que lo hace permanente. Claro, cristalino, imaginístico, sus versos ansían, descubren la invariable humanidad de cada fervor que canta. Es el poeta que vive si se interpreta lo que ha vivido. Se hace al descubrimiento de las nociones de la filosofía de la vida. En danza o mímica es lo mismo. Su mirada se dimensiona hasta hacerse minúsculo cuando encuentra el punto de la conversión lírica. Aquí entre sus versos, con una lámpara de orientaciones, habremos de encontrarnos con un poeta peruano que ha alcanzado el virtuosismo de la verdadera poesía. César Toro Montalvo