Editorial(es): Alejo Ediciones
Lugar de publicación: Lima
Año de edición: 2016
Número de páginas: 36
Hijo de viernes, está colmado de poemas expresivos y detallistas que le hablan a “ella” a través del “tú” como un monólogo íntimo que exalta al cuerpo de la mujer, el goce sexual y la sensualidad.
Sus versos denotan la voracidad por la carne, el fruto y colocan a las formas femeninas sobre un altar pero también lo relacionan con lo prohibido, lo pecaminoso, con la perdición, con las “noctámbulas rosas desnudas”, como él las llama.
Aunque por momentos sus textos suenen a oda en general no prima un tono festivo más bien uno nostálgico, de resignación, olvido y adiós.
En esta, su primera obra, el poeta Julio Villar nos regala su intensidad poética, su manejo del ritmo y armonía. Como lo haría un buen pintor Villar colorea y matiza sus versos, hace degradés, juega con los contrastes y pone los objetos en diversos planos. Pero sus colores favoritos no son los claros, sino los rojos y oscuros. De ahí que el tema existencial y de la muerte afloran luego de haber poetizado sobre el eros con tanta vitalidad. Isabel Matta Bazán