Se trata en primer término de un vocabulario, no de un repertorio; de una recopilación de definiciones, no de reglas. Además de las distinciones propiamente dichas, el diccionario contiene también algunas comparaciones expuestas en ejemplos prácticos. El libro deja a disposición de lectores no jurídicos y del público en general esta relación de términos usados generalmente en cuestiones jurídicas, en las sentencias y en actos notariales, para ayudar a comprender las expresiones a veces arcaicas, sus fórmulas complicadas pero útiles, dado que la vida del hombre se desarrolla en una atmósfera jurídica, y la trama de la vida social está basada sobre relaciones de derecho. Por ello es indispensable conocer las sinonimias de las palabras que constituyen su lenguaje.