No les dirá cómo sujetar al recién nacido, ni mucho menos cómo bañarlo; esta “guía” nos muestra las dos caras de la moneda de la paternidad.
Con una prosa clara y ágil, Helguero nos aproxima a los quehaceres y preocupaciones que un niño pequeño suscita, mostrando las dificultades que deben afrontarse. No obstante, Helguero dota a sus historias y personajes de una ternura e inocencia conmovedoras, ofreciendo una propuesta personalísima, llena de matices y de una extraña sabiduría, sin consejos definitivos ni fórmulas salvadoras.