Marco Martos
'La poesía es una ética' 'La poesía es una ética'

Por Gonzalo Pajares Cruzado
Fuente: Peru21, Lima 20/09/06

Marco Martos es un académico que luce y se comporta como tal. Ceremonioso, pausado y risueño, nos recibe en su recinto sanmarquino: la Facultad de Letras, de la que es decano. Martos es, además, una de las voces poéticas más destacadas de la generación del 60 y presidente de la Academia Peruana de la Lengua. Acaba de publicar Aunque es de noche (Hipocampo Editores), aventura lírica en donde aborda de lleno el tema de Dios y de la religión.
 

Usted tiene 40 años en la poesía. ¿Cómo llega al tema religioso?
Es un tema que siempre me había rondado y que no había tocado hasta hoy. La religión está en la especie humana, la ha acompañado siempre, ya sea para negarla o aceptarla. Es muy raro que haya personas indiferentes a ella. Además, como vivimos en una cultura religiosa, pueden ocurrir cosas muy graciosas: en los 60 había una Liga Atea en Trujillo que terminaba sus oficios con la frase 'Dios guarde a usted' (risas).

¿Escribir sobre Dios fue deliberado?
Mis primeros libros fueron una reunión de poemas. En cambio, en los últimos años he mejorado mi técnica de escritura y estoy en capacidad de escribir poemas de casi cualquier tema. En mis últimos textos, esto se nota mucho. Mi anterior libro fue sobre el ajedrez; el siguiente, sobre Dante. Me siento como un mago que ha aprendido a hacer muchas cosas y que, por eso mismo, tiene que sistematizarlas.

Pero hay antecedentes de estos temas en su vida y en su obra.
Siempre estuve relacionado con la mística, no tanto con la religión. Esta relación empezó por el gran afecto que les tengo a los místicos españoles como San Juan de la Cruz, Santa Teresa y Miguel de Molinos. Descubrir a De Molinos me empujó a escribir Aunque es de noche.

Sorprende que usted aborde el tema religioso siendo un intelectual de izquierda, con una visión materialista.
Me he preguntado lo mismo. Mi visión socialista no ha cambiado. Sigo considerando valiosos los aportes de Marx y de Mariátegui. Lo que ha cambiado es que ya no considero a ningún proyecto social como un dogma, porque sería otra forma de religión. George Steiner observó -en La nostalgia del infinito- cómo el tema religioso marcó, incluso, a grandes ateos como Carlos Marx, quien dice que el ideal del hombre es pagar amor con amor. Sin duda, este principio parece religioso. Es más, el marxismo es -en su sentido más puro- la voluntad de construir un paraíso en la tierra. Marx agrega que, lamentablemente, el hombre está alienado por el dinero, lo que sigue siendo una verdad.

¿Este bien común planteado por Carlos Marx es religioso?
Es una ética que puede ser religiosa y que cualquier cristiano suscribiría. Otro pensador que construyó un sistema ético fue Freud.

¿No será que en Occidente la religión se ha apropiado de la ética?
Pudiera ser. Sin embargo, la ética no necesita de la religión. El humanismo es una ética. Es más, yo pienso que la poesía es, en sí misma, una ética. La actitud de expresarse y de involucrarse totalmente en el hecho poético es una actitud ética. El que no lo toma así -y escribe poesía circunstancialmente- no ha logrado penetrar en los misterios de la poesía. Lo más valioso del hombre es el lenguaje y, dentro de él, la poesía expresa la esencia de todo lo humano.

Sus poemas son oraciones. ¿A quién le reza?
Lo son. Una de las cosas que más me asombra es que enemigos radicales -como los mahometanos y los cristianos-, cuando dicen Dios, están diciendo Dios, a secas. Me interesa, además, lo que las religiones tienen en común y los puntos de convergencia entre agnósticos y creyentes.

¿Marco Martos necesita a Dios?
(Piensa) Como poeta, no lo había necesitado. Ahora sí.

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