Por Carlos M. Sotomayor
Fuente: Correo, Lima 02/04/07
Carlos Wertheman publicó hace dos años su ópera prima City. Ahora nos entrega Parque (Tranvías editores), poemario que, tras un largo silencio luego de haber sido finalista del Copé –a fines de los noventa–, reclama mayor atención.
Correo: Parque es anterior en escritura a City. ¿Por qué aparece después?
Carlos Wertheman: Cecilia Podestá (fundadora de Tranvías editores) me habló acerca de una colección del libro objeto. Ella ya había leído los textos de City y le pareció que era lo apropiado para empezar la colección. Ella me convenció. Yo estaba muy reacio a publicar. En todo caso estaba reacio a publicar City primero.
C: ¿Cómo así decides que era hora de publicar Parque?
CW: Nos pusimos de acuerdo con Cecilia de que debía de salir ya, sí o sí, pues si no iba a estar continuamente dándole vueltas al texto. Llegó un momento en que no había cuando acabarlo, y quería cerrarlo ya. Eso me estaba impidiendo trabajar otras cosas, se había convertido en el eterno expediente abierto.
C: El poemario presenta una historia, la de la ruptura sentimental de los dos personajes...
CW: Es un libro que se ha escrito durante muchos años. Y formaba parte de un proyecto muchísimo más grande. Parque formaba parte de un proyecto de novela: la historia de estos dos personajes y su entorno. La novela terminó por abortar. Sin embargo, algunos de los personajes escribían textos que luego fueron parte de Parque.
C: Uno de los versos dice: “¿Por qué sólo los árboles pueden perdonar?/ sólo ellos tienen la paciencia para afrontar el olvido”.
CW: La figura del árbol es recurrente, tanto aquí como en City. Me interesa mucho el trabajo del entorno. En mi arte poética el entorno es un elemento vivo. Y es un elemento determinante.
C: Se dice que a diferencia de la narrativa, en la poesía el autor está más expuesto...
CW: Es cierto, yo pienso lo mismo. En la poesía voluntaria o involuntariamente te expones más. O, incluso, si tú no te expones es probable que tu lector asuma que sí te has expuesto.