www.librosperuanos.com
Por: Abelardo Oquendo
Fuente: La República. Lima, 25 de abril de 2004

Es difícil imaginar un mejor servicio al libro nacional que el que han empezado a prestarle las hermanas Virginia y Prísea Vílchez con el establecimiento de un sitio en Internet dedicado a la difusión de lo que se edita entre nosotros.

El libro peruano, como lo saben bien autores, editores y lectores, tropieza con graves y variados problemas para su debida circulación. Uno, nada menor, es la escasa atención que logra -salvo contadas excepciones- en los medios de comunicación. Otro, la desganada recepción que encuentra, por lo general, en nuestras librerías; otro más, el reducido espacio que se le da en ellas -cuando se le da alguno- en los sitios de exhibición.

Entre las librerías de primer nivel, solo en El Virrey es visible una preocupación activa por abastecerse de publicaciones hechas en el país; de las principales, al menos. De las principales, pues esas publicaciones son bastante más de lo que parece, y no es infrecuente que, dado el comportamiento del mercado, el suyo sea la búsqueda de alternativas cuando no el desaliento. Así, ¿cómo estar oportuna y suficientemente informado de la producción bibliográfica nacional?

Ninguna solución más práctica y a la mano para tal estado de cosas que un sitio en la red. Ese huevo de Colón ha cobrado existencia gracias al esfuerzo de las hermanas Vílchez. Ahora basta entrar al portal librosperuanos.com para tener acceso a un catálogo superior a los 7,000 títulos. En su mayoría, estos corresponden a ediciones de las dos últimas décadas del siglo XX, pero se trata de la fase inicial de una obra en marcha que engrosará y se irá actualizando constantemente.

Desde luego, el portal ofrece más que una lista clasificada de libros. Se encuentra allí información sobre parte de ellos, que habrá de incrementarse; datos sobre autores, editores y entidades que hacen publicaciones, y documentos relacionados con la legislación editorial. Hay, también, un espacio denominado Rincón del Lector, abierto a la participación de los visitantes, y una sección vinculada al comercio electrónico de material impreso.

"La idea es que el portal sea una vitrina para los escritores de todo el país, porque en provincias también hay una producción que no se conoce. El propósito es la difusión y realizarlo nos ha costado mucho trabajo desde que lo proyectamos, en el 2002", dice Virginia Vílchez. Ella condujo durante largos años la librería Germinal, que ya no existe, pero a la que ha sobrevivido su vocación. Una vocación librera que plasma ahora en una iniciativa al servicio de la cultura y de la cual es mucho lo que cabe esperar.